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jueves, 19 de septiembre de 2013

Los hijos de la tumba

Master of Reality (Black Sabbath, 1971)

 

HEAVY BLUES DE CATACUMBAMaster of Reality, una nueva barbaridad, es un disco enorme en el panteón de los Sabbath. Perteneciente todavía a esa primerísima época en la que el grupo se enchufaba en el estudio y grababa todo un clásico en unas horas, el disco brilla precisamente por su crudeza. La ausencia de pulimento o barniz deja en el tuétano unas canciones que parecen grabadas en una gruta minúscula y asfixiante. Aun así, pasado el tema inicial, el sonido se vuelve totalmente aplastante, con ese bajo en primer plano que otorga un grosor y una estatura brutal a todo. Un sonido que no deja de ser angustioso. Tony Iommi bajó la afinación a C# para aliviar el dolor en sus dedos amputados, lo que generó el sonido más grave y denso del grupo hasta ese momento. El mantra perfecto sobre el que Ozzy canta con tanta devoción, el que te engancha para siempre. En el que puede ser el disco más duro de los de Birmingham.

Estos son los secretos de un álbum de riffs perversos y atronadores. Un momento histórico con un pie en el rock setentero más clásico y otro en un futuro metálico de infinitas ramificaciones. "Sweet Leaf" e "Into the Void" anuncian solitas lo que sería el stoner rock o el doom metal, mientras que "Children of the Grave" sería el santo grial para los futuros Iron Maiden o Judas Priest. También hay piezas reposadas que aún no suenan horteras, sino que pueden incluso emocionar, como "Orchid" o la estupenda "Solitude".

La coca todavía no había empezado a hacer estragos en el grupo. En esta época consumían básicamente alcohol y toneladas de maría. De ahí el homenaje a la hierba en la canción que abre. Una combinación que, por poco deseable que sea, no se puede comparar a los efectos devastadores del polvo blanco. Lo veríamos en futuros trabajos, pero aquí nos encontramos a una banda rozagante, engrasada y contundente como nunca. Aquí se puede decir que empiezan realmente a tocar heavy metal. Lo anterior era solo una aproximación al sonido que reventaría en apenas diez años desde este momento y que aquí está ya perfectamente articulado. 

Master of Reality es un nuevo hito para Black Sabbath y para el rock. La tercera diana en solo un par de años. Quizás porque se hizo sin pensar, sin planearlo al detalle. En esos años de juventud en los que uno está continuamente en llamas. Salió desde las tripas y esa verdad es el auténtico secreto de la inmortalidad.

A1 Sweet Leaf ✔
A2 After Forever

A3 Embryo
A4 Children of the Grave
B1 Orchid
B2 Lord of This World
B3 Solitude
B4 Into the Void

Total: 34 min. 

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