Miami (The Gun Club, 1982)
PSYCHOBILLY/BLUES TRIBAL. Por la portada podría ser el que eligieras para sumergirte en la banda angelina. Es una de esas instantáneas que lo tienen todo para atraparte para siempre. La lástima es que lo que oculta el rosa perverso de Fire of Love (1981) acaba siendo lo más importante que grabaran. Sin desmerecer la andanada de rock puñetero y cabrón que contiene esta continuación, más que digna, pero claramente inferior.
El segundo de The Gun Club es un potaje borboteante de blues tribal y rock pantanoso. El sol que conjura su título y su portada es el mismo astro negro de The Doors, sin teclado, eso sí, pero con el mismo mojo y la misma energía chamánica de Jim Morrison. Un artista al que Jeffrey Lee Pierce parece invocar aquí como nunca. Como a John Fogerty, versión de la Creedence incluida, y como a un country & western que se mezcla con su adoración por el blues con la claridad del cielo del desierto.
Esa negrura a lo Johnny Cash es también su losa. En tonadas que no acaban de resolverse bien, como "Like Calling Up Thunder", "Brother and Sister" o esa impotente "Watermelon Man". Y en un rosario de desafinaciones y entonaciones más que dudosas a lo largo y ancho del plástico. Bastante mejores son las dos versiones que se marcan y esas "Carry Home" y "Mother of Earth" con las que abren y cierran respectivamente. Sin duda alguna, dos de sus mejores canciones. También destacaría "A Devil in the Woods" y "The Fire of Love", muy buenas las dos, pero en definitiva, no tanto como para decir que estamos ante una joya irrebatible.
★★★☆☆
No hay comentarios:
Publicar un comentario