martes, 3 de agosto de 2021

Soltando a los perros

Concert: The Cure Live (The Cure, 1984) [DIRECTO]

POP SINIESTRO. A día de hoy este primer directo de la banda es de los pocos discos que no han sido remasterizados ni restaurados ni nada por el estilo. Esto es una señal inequívoca del poco interés del grupo por una obra que en su momento necesitaron más ellos que el resto del mundo. Bueno, eso y que de todos los que tocaron aquí solo sigue en el grupo Robert Smith.

Este directo tiene pocas cartas ganadoras, pero alguna sí que se esconde en la manga. Es un documento fiel e intenso de esos primeros años, años grises antes del asalto a los cielos que supusieron esos mastodontes llamados A Head on the Door (1985) y Kiss Me Kiss Me Kiss Me (1987). Los medios con los que contaba la banda no eran comparables a los que manejarían años después. Por eso no es justo comparar este álbum con monstrencos como Show (1993) o la serie de conciertos conmemorativos que dieron y publicaron en 2019, por decir unos cuantos de los más populares. Que no quiere decir que sean superiores, pero si nos fijamos en el sonido, la duración y lo apabullante del repertoro, claro, no hay color.

Concert: The Cure Live se disfruta mejor si bajamos al barro de esos años iniciáticos, cuando la banda era más humilde y su música más epidérmica. Un chute de energía que para algunos es lo más auténtico que nunca ha ofrecido The Cure. Sí, siempre hay quien piensa que con el éxito masivo se pierden demasiadas cosas. Todas las mentiras tienen algo de verdad, pero tampoco puedo sustraerme al hecho de que el bajo aquí lo toque Phil Thornalley en lugar de Simon Gallup y a la batería esté Andy Anderson en lugar de Boris Williams. No es que se note tantísimo, pero de alguna forma se siente en lo mate del sonido, en esas ganas que te entran de que esto sonara más rotundo, en detalles que ni siquiera "A Forest" puede volar por los aires. Vean si no esa anémica "Primary" para saber a qué me refiero.

De todas formas y a pesar de todo lo malo que he soltado sobre él, creo que puede ser mi disco en directo favorito de The Cure. O al menos aspirar a serlo. Los otros que menciono podrán ser más impresionantes, pero no tienen la concreción ni la verdad que ofrece este documento en blanco y negro de una época en la que todo era más sencillo, más cercano y más nuestro. Nunca fui de compartir, lo siento. 

★★★☆☆

A1 Shake Dog Shake
A2 Primary
A3 Charlotte Sometimes
A4 The Hanging Garden
A5 Give Me It
B1 The Walk
B2 One Hundred Years
B3 A Forest
B4 10:15 Saturday Night
B5 Killing an Arab
 
Total: 42 min.
 

 

El disco se grabó durante la gira de The Top (1984), para el que contaron con la colaboración puntual al saxo de un Porl Thompson que se iba a convertir en figura clave del grupo solo unos meses después. De hecho aquí ya toca como miembro de pleno derecho desdoblándose al saxo, teclados y guitarra. Una de las pocas adiciones que iban a perdurar y a tener trascendencia en una banda siempre necesitada de caras carismáticas en todas sus posiciones.

Robert por su parte seguía con su intensa colaboración con Siouxsie & the Banshees, llegando a meterse en labores compositivas para el álbum Hyaena del mismo año. Siouxsie no tardaría mucho en contratar a un nuevo guitarrista, Valentine Carruthers, y así Robert pudo concentrarse por fin con los cinco sentidos en su banda. Pronto llegaría The Head on the Door (1985), el gran salto en su discografía y la prueba irrefutable de que Smith estaba por fin recuperado. 

DISCOS RELACIONADOS


No hay comentarios:

Publicar un comentario