En el corazón de la pesadilla

The Head on the Door (The Cure, 1985)

 

POP SINIESTRO. Lo onírico siempre ha tenido un influjo más que evidente en la música de The Cure. Más concretamente en las letras de un Robert Smith que siempre ha usado sus sueños como materia prima para sus textos. Algo que cobra todavía más fuerza en el sexto disco de la banda, cuyo título y "Kyoto Song", como mínimo, vienen de los sueños inquietantes de Robert y su esposa.

The Head on the Door vive en esa interzona, en ese equilibrio imposible entre la vigilia y la realidad. Es un disco de apariencia festiva, pero que se descubre al segundo poblado de fantasmas. Una obra que lucha entre la oscuridad del underground y la fama mundial. Un éxito comercial que acabó consiguiendo apoyado en la promoción, más masiva que nunca para el grupo, en el crecimiento como compositor de Robert y como intérpretes de todos, y sobre todo en una dupla de singles de ensueño como fueron "In Between Days" y "Close to Me". Si a estas les añadimos "A Night Like This" tenemos sin duda alguna tres de las mejores canciones de la historia de la banda.

Ahí está el secreto de este álbum. En esas tres patas sobre las que sostener a todo lo demás. Tras ellas todavía hay una segunda línea más que suculenta en la que colocaría a "Kyoto Song", "Six Different Ways", "Push" y "Sinking", absolutamente inapelables también. Otra cosa sería el resto, las cuales veo bastante por debajo o al menos demasiado dudosas como para hacer del disco una obra maestra, cosa que creo que no es en absoluto.

En resumen, The Head on the Door es un disco de altibajos con picos altísimos, los cuales acaban llevándose el gato al agua en su tasación. Un disco en el que Smith afiló su pluma como nunca y en el que abrió su estilo al pop en toda la extensión del término, con canciones movidas, bailables incluso, pero conservando ese hálito de condena que hace que nada de lo que toquen los Cure pueda sonar alegre al cien por cien. Esa era la fórmula. Ahora tocaba perfeccionarla y aplicarla una y otra vez hasta tocar las estrellas. Y lo conseguirían.

★★★★☆

A1 In Between Days ✠

A2 Kyoto Song

A3 The Blood

A4 Six Different Ways

A5 Push

B1 The Baby Screams

B2 Close to Me

B3 A Night Like This ✠

B4 Screw

B5 Sinking

 

Total: 38 min.

 

 

Lo de los sueños y este disco es algo que siempre me ha rondado la mente. Algo inseparable de su portada, de sus letras y de su música entre lo perverso, lo exótico y lo terrenal. Morfeo está en todo eso, en los videoclips, en la línea de bajo de "Close to Me"... Y por supuesto en la imagen promocional que eligieron, con esas caras y ojos pintados de rojos y verdes imposibles. Está claro que la estética siempre ha sido clave para el grupo.

En la imagen la formación para este disco y hasta Disintegration (1989): Lol Tolhurst, Robert Smith, Boris Williams, Simon Gallup (volvió el hijo pródigo) y Porl Thompson. Dream Team.

 

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