jueves, 30 de julio de 2020

El lado oscuro del funk

Sly & the Family Stone
San Francisco, CA, USA

De familia religiosa, Sylvester Stewart se formó en el góspel junto a sus hermanos, algunos de los cuales le acompañarían en esa Sly & the Family Stone que sería la primera banda interracial de los muy racistas EE.UU.. Esto le trajo problemas también con los Panteras Negras, que lo querían como emisario de sus reivindicaciones y le exigían una postura más beligerante que la que reflejaban su comunidad y sus letras.

Sly siempre fue a lo suyo y cultivó una imagen de estrellona estridente y extravagante en las formas y el vestir. Una imagen que combinó con una adicción galopante a la droga dura, pero que nunca pudo ocultar el meollo de un genio de la composición y el arreglo. Un multinstrumentista que lo tocaba todo. Eso hizo prácticamente en su obra maestra, There’s a Riot Goin’ On, de 1971, donde sólo dejó espacio para los vientos y los coros femeninos.

Esa voracidad es su seña de identidad y uno de los secretos de su influjo. Si esta es la medida de tu genialidad, juzguen ustedes. No hay muchos por ahí que hayan influido a la vez en gente como Miles Davis o Jimi Hendrix. Ninguno del que se pueda decir que Prince sin él simplemente no habría existido o que haya influenciado tanto en la música más blanquita, Red Hot Chili Peppers, sin ir más lejos.

Sin duda estamos delante de un genio imprescindible. Uno que puede hablar de tú a titanes como Marvin Gaye, James Brown o Johnny Cash. Uno de ese selecto grupo que van a pervivir en la memoria del tiempo.

DISCOS RUID0
  • Stand! (1969)
  • There's a Riot Goin' On (1971) 🌟🌟🌟
  • The Essential Sly & the Family Stone (2003)

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