El lado del corazón

El bando bueno (Sr. Chinarro, 2020)

POP CHINARRO 2.0. Vuelve el Chinarro. Fiel a su cita, con todos ustedes, el artista que hace discos como churros, prolífico hasta la extenuación, pero siempre certero y casi siempre conmovedor. Es cierto que corre el riesgo de repetirse en exceso hasta perder el interés de su parroquia de fieles, aunque de momento se mantiene cómodo en esa zona intermedia en la que seguimos disfrutando de su inspiración aun sin llegar a las cotas de brillantez de antaño.

 

El bando bueno sigue en la línea de sus últimos trabajos y nos vuelve a ofrecer un gran título con múltiples interpretaciones. Un Antonio Luque metamorfoseado en El Greco, mano derecha sobre el corazón, nos insta a tomar partido si es que eso es posible. Porque ¿cuál es ese "bando bueno"? ¿Está hablando de relaciones personales o amorosas? ¿Va esto de política? Cada uno tendrá su idea y lo cierto es que todas son exploradas en esta obra. Lo de siempre con la maestría habitual. El amor, la falta del mismo, la recreación de los años de mocedad con el sexo en primer plano, el ecologismo o el lado menos glamuroso del artisteo y la fama. Un exposición de los males y las glorias del ser humano en toda regla.

Así se hace imposible tachar esto de redundante o innecesario. Así, Antonio Luque puede tirarse toda la vida haciendo discos. Puede que no vuelva a desgarrarnos el alma, pero consigue sacarnos la sonrisa, hacernos reflexionar, paladear las palabras y, en definitiva, meternos en un mundo que nos ayuda a soportar nuestra tediosa existencia. Visto así, chapó. Queda claro una vez más. Un disco medianito de Sr. Chinarro es mejor que la mayoría de tonterías que idolatra la gente moderna. Así lo veo y así lo siento.

★★★☆☆

1 Una famiglia reale 3:06

2 Planeta B 3:54

3 Escorpio 3:46

4 Telaraña 3:23

5 Sábanas santas 3:06

6 Depresión 2:50

7 Aplauso 3:40

8 Arlequín 3:37

9 No recuerdo 3:23

10 La odisea 3:31

Total: 34:16

A veces hay que pecar de obvio. El trampantojo que Antonio Luque nos propone para su portada es tan poderoso como poco innovador, pero tenía que aludir a él en esta postdata. Ahí están los dos, El Greco y Luque con su mano en el pecho, apelando a esas gentes de bien que tienen un corazón al que escuchar. 

 

No es baladí en estos tiempos de ira y caos con el surgimiento de movimientos que nos quieren llevar atrás en el tiempo. Una vez más, el sevillano vuelve a dar en el clavo y con una imagen del pasado nos retrata el presente más atroz.