ROCK ALTERNATIVO. Vuelve el rock a tumba abierta. Vuelven los más chulos del panorama a tratar de calmar nuestra sed. Cuatro añazos después de esa inyección de opiáceos que fue Stoned & Dethroned (1994), los Jesus tratan de recuperar el tono con un disco de rock por derecho.
Y lo hacen calcando la estructura del álbum anterior, esto es, sus diecisiete temas, aunque esto no significa que se parezcan. Para empezar en esta ocasión se han dejado de buscar la concreción y se han ido hasta rozar los setenta minutazos. Y para seguir vuelven a contar con la colaboración de Hope Sandoval (Mazzy Star), pero desde un ángulo totalmente diferente. La dulzura que derrochó la cantante en "Sometimes Always" se transforma aquí en angustia atenazante en una tensa y casi agonizante "Perfume". Dos polos opuestos que reflejan a la perfección lo que pasa en este álbum.
Una grabación que peca de dispersa y que se pierde en toda su euforia y su oscuridad. Riffs casi clásicos y certeros como el mejor francotirador propulsan los temas más convulsos mientras conviven con experimentos de disonancia y paisajes de pop trotón que los intenta reconciliar con el fan de toda la vida. Casi lo consiguen. Munki iba a ser una despedida muy digna. Una despedida falsa que fulminarían con una reunión casi diez años después y con un disco con canciones nuevas casi veinte años más tarde. Estaba claro que estaban predestinados a recomponerse, pero con este disco el seguidor fiel presenciaba con resignación un adiós tan agridulce como su música. Se puede pedir más, pero a veces tampoco hay que ser tan exigente.
★★★☆☆
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