NEW WAVE. Complicado puntuar los discos en directo. Siempre lo he dicho. Y este más que otros. No puedo más que otorgarle una calificación temporal que se corresponde con el momento actual y que en cualquier otro podría variar de 3 a 5 con facilidad. A mis amigos siempre les ha maravillado este disco. A mí nunca me ha acabado de enamorar como a ellos, aunque sí que lo he disfrutado a mi manera. Siempre me ha parecido muy frío, como si fuera un recopilatorio de grandes éxitos. Y siempre he tenido claro lo que a ellos les flipaba de esto. A saber, un sonido impactante, versiones más o menos fieles tocadas con contundencia rockera, selección (casi) completa de clásicos y la voz expresiva de Santiago en primera linea. Ingredientes claros y efectivos 200%.
Ingredientes que ahora me hacen preguntarme la auténtica calidad de la obra, porque, ¿no la acercan a la radiofórmula peligrosamente? Siempre había pensado que el hecho de que este grupo sonara en la radio comercial era un signo de los tiempos. Vamos que hoy en día lo vería improbable. Por otra parte los ingredientes contradicen casi al 100% los mandamientos del punk a los que suelo someter cualquier disco en directo. Y además, con el molde rock con el que fabrican las rendiciones se pierden muchos matices. Se pierde el toque latino/africano (casi imperceptible en "Semilla negra") y se pierde el puntito tortuoso de "Han caído los dos". Se pierde la presencia majestuosa de los teclados en "A cara o cruz" y en "El canto del gallo" por estar algo enterrados en la mezcla, un pecado imperdonable en un disco que es todo bajo y batería.
También es cierto que se gana en contundencia. Y claro, si resulta que los peores defectos que puedo achacar a un disco pueden ser, si se miran desde otro ángulo, tremendas virtudes, la cosa está clara. Que al final el disco es excelente. O casi. Si obviamos todo el trabajo de postproducción, cosa que no deberíamos hacer nunca porque si esto no es de verdad, ¿qué es entonces?
★★★☆☆
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