Make Yourself (Incubus, 1999)
METAL ALTERNATIVO. La "obra maestra" de Incubus hizo levantar la ceja a medio mundo dentro de las coordenadas limitadas del metal. Alabada por su arrojo y su eclecticismo, levanta unas expectativas que van a verse colmadas dependiendo de lo curtido que estés con los entresijos de lo verdaderamente experimental. Y es que lo cierto es que esto de avanzado tiene algo, pero muy poco, de alternativo, lo mismo, y de experimental, casi nada. A decir verdad, me cuesta distinguir esto del nu metal más canónico.
Si hay que agarrarse a algo, y es de recibo intentarlo, alabaremos en lo que vale ese funk rock que tiñe algunos temas, esos riffs poco convencionales en su asimetría que estallan por ahí, y en definitiva, todos esos toques sincopados, arriesgados y exógenos a la cerrazón del metal más canónico. Eso es imposible que no te pique la curiosidad.
El problema es que al final no resulta suficiente para convencerme. Porque por mucho que pretenda dejarme seducir por toda esa brillantina, al final se acaba cayendo y deja a la intemperie que solo era una excusa para reincidir en la combinación estallido-coro melódico, angulosidad-delicadeza melindrosa. Un juego de extremos que a estas alturas no puede engañar a nadie. Cuando no sé si estoy ante el colmo de la emoción o ante puro plastiquete, algo malo se debe estar cociendo.
★★☆☆☆
No hay comentarios:
Publicar un comentario