COUNTRY CELESTIAL . Los hermanos Louvin son unos clásicos. Si no te suenan es por la alergia que se tiene y el olvido en que se sume a todo lo viene de los 50. La que fuera considerada no hace mucho una década gloriosa en lo musical está siendo enterrada por la modernidad y la infinidad de propuestas "novedosas", la mayoría de las cuales son burdos aparatejos al lado de obras de verdad como estas Tragic Songs of Life. No se trata de un disco que experimente con nada ni que contenga retruécanos innovadores que lo acerquen a la "alta música" que la intelligentsia considera valiosa. Es una sencilla colección de historias, de canciones que te tocan de lleno el tuétano desde lo más básico.
No es exagerado, de eso pueden estar seguros, afirmar que este disco puede colocarse en el mismo altar de todos los grandes. Por muchos motivos. El primero sería porque nos hace acercarnos a la música de una forma pura y libre de prejuicios. Como cuando la descubríamos de niños. El segundo es que como disco para cantar no tiene parangón. Cantar estas canciones mientras suenan y tratar de unirse al dueto prodigioso que forman las voces perfectamente entrelazadas de Ira y Charlie es siempre una experiencia gozosa como pocas. Siempre lo he dicho, el country es la mejor música para cantar, y este disco me lo confirma con creces.
No es exagerado, de eso pueden estar seguros, afirmar que este disco puede colocarse en el mismo altar de todos los grandes. Por muchos motivos. El primero sería porque nos hace acercarnos a la música de una forma pura y libre de prejuicios. Como cuando la descubríamos de niños. El segundo es que como disco para cantar no tiene parangón. Cantar estas canciones mientras suenan y tratar de unirse al dueto prodigioso que forman las voces perfectamente entrelazadas de Ira y Charlie es siempre una experiencia gozosa como pocas. Siempre lo he dicho, el country es la mejor música para cantar, y este disco me lo confirma con creces.
Lo confirma aliándose con esa sencillez tan fácil de nombrar y tan difícil de conseguir. Esa que todos quieren y tan pocos dominan. Es que hay que tenerlos bien puestos para eso. Para eso y para cantar una canción haciéndose pasar por una mujer. Cosas que nunca han sido fáciles, ni ahora ni mucho menos a mediados del siglo XX.
★★★★★
A1
Kentucky
2:39
A2
I'll Be All Smiles Tonight
3:14
A3
Let Her Go, God Bless Her
2:55 ✠
A4
What Is Home Without Love
3:00
A5
A Tiny Broken Heart
2:34
A6
In the Pines
3:15
B1
Alabama
2:43 ✠
B2
Katie Dear
2:34
B3
My Brother's Will
3:16
B4
Knoxville Girl
3:49
B5
Take the News to Mother
2:48
B6
Mary of the Wild Moor
3:11
Total: 35:58
Según las reseñas, el disco empezó a grabarse en mayo del 52 y terminó en el mismo mes del ¡56! Si no se trata de un error tipográfico, es un ejemplo perfecto de cómo se hacían las cosas en esos tiempos. A fuego lento, pero de verdad.
Es notoria la "dificultad" que tenían los hermanos Ira y Charlie para cantar canciones alegres y animadas a pesar de tener varios éxitos en ese campo. Por eso cuando se les ofreció grabar este primer LP les salió una colección de canciones de abandono, asesinato, nostalgia y un dolor que solo podía sanar a través de sus entonaciones gloriosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario