Leves destellos de magia

Walking into Clarksdale (Jimmy Page & Robert Plant, 1998)

ROCK. Estaría bien para muchos que Led Zeppelin hubieran decidido reactivar su carrera con este disco, pero no debemos olvidar antes de darle al play que no era el caso. No solo porque faltaba una pieza clave como es John Paul Jones, sino porque la elección de un productor icónico del rock alternativo como Steve Albini ya debería darnos pistas.

Tampoco podemos olvidar que seguir donde lo dejó el cuarteto británico es continuar a partir de álbumes como Presence (1976) o In Through the Out Door (1979), discos mediocres más allá de un par de temas que puedan reclamar su condición de clásicos. La nostalgia tiende a obviar hechos como este a la vez que nos transporta directamente a los tiempos de "Whole Lotta Love" y "When the Levee Breaks".

Hablar por tanto de decepción a primeras de cambio, con solo un par de escuchas, me parece bastante precipitado. Es cierto que el disco no es ninguna maravilla, que las canciones se arrastran en unos desarrollos en los que sobran minutos por todos lados, que no tienen la relevancia ni la pegada de antaño, pero ¿de verdad podíamos esperar otra cosa?

Creo que lo mejor que podemos hacer antes de poner el disco a sonar es mentalizarnos y dejarlo que se explique. Seguro que con esa actitud nos encontramos una obra que tiene su pizquita de gracia y que, a pesar de que no sea para ponernos todos los años, puede apetecernos muy de vez en cuando. No es mucho, lo sé, pero este rock desnudo (salvo las orquestaciones de rigor) es lo máximo que puede ofrecer a estas alturas de la película. Y dadas las circunstancias, yo creo que el dúo firmaría el resultado y puede darse por satisfecho.

★★✩✩✩

1 Shining in the Light 4:01

2 When the World Was Young 6:13

3 Upon a Golden Horse 3:52

4 Blue Train 6:45

5 Please Read the Letter 4:22

6 Most High 5:37

7 Heart in Your Hand 3:51

8 Walking Into Clarksdale 5:18

9 Burning Up 5:22

10 When I Was a Child 5:46

11 House of Love 5:36

12 Sons of Freedom 4:07

Total: 60:50

La portada es algo para tratar aparte. Esos niños con alas de ángel ni sé lo que significan ni me evocan nada aparte de una ligera dosis de mal gusto y de pereza por parte del artista gráfico.

El título sí tiene su miga, ya que, según parece, se refiere a la ciudad de Mis!sissippi donde muchos sitúan la cuna del blues. Un título que no deja de ser extraño, porque, por muchos elementos de esa música que encontremos en el álbum, tampoco se puede decir que sepa a blues como lo que hacían antaño.

No, esta vez no han dado en el clavo con las referencias.