POST-PUNK. Homenaje desde la esfera independiente española auspiciado por el Colectivo Karma, asociación radicada en Sevilla que tira del terruño para completar una alineación bastante andaluza de gente herida de muerte por el aliento de Ian Curtis y los suyos. Entre el elenco encontramos primeras espadas como Los Planetas, Sr. Chinarro, Mercromina y El Niño Gusano, una segunda línea aguerrida compuesta por Automatics o The Pribata Idaho, y un grueso de grupos más bien desconocidos. Pero estamos hablando de Joy Division y con estas canciones se obra la magia de igualarlos a todos.
Con un artefacto de este tipo tenemos dos opciones: o entrar a fiscalizar cada movimiento elegido por las bandas en cuestión, o dejarnos llevar y disfrutarlo como el divertimento que pretende ser. También podemos coger la calle de en medio, claro, y ahí tendremos que concluir que, mejores o peores, las versiones tratan de desviarse en la búsqueda de una originalidad que no sé si saldrá de la inquietud artística o del ego desmedido.
Eso es lo que domina aquí, la aproximación tangencial, el llevármelos a mi terreno. Unas veces sale bien, otras no tanto, pero si nos dejamos de zarandajas, tendremos que admitir que el disco nos devuelve las ganas de sumergirnos en la música de los mancunianos, que se nota que los diferentes grupos adoran a los homenajeados y que se percibe que lo están pasando en grande. De eso se trata con estas chucherías ¿no? Pues conseguido.
★★★☆☆
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