Dirt (Alice In Chains, 1992) ♠
GRUNGE METAL. Demasiado, demasiado pronto. El grunge estaba en la cresta de la ola y Alice in Chains, más que surfearla, se dejó zarandear con una violencia que por poco no termina con ellos. Grabado entre Seattle y California, entre revueltas raciales, visitas al desierto, peleas con el productor, alcohol y drogas duras, lo extraño no es que llegara a buen puerto, sino que todos se mantuvieran con vida al final de su grabación.
Así salió lo que salió. En "Dirt", los vaqueros metálicos subliman un estado de ánimo y una tortura que debía arder como el núcleo terrestre en sus almas atormentadas. O eso es lo que se extrae de la supervivencia a una escucha poderosa y exigente a través de un periplo arduo por canciones largas y riffs con exceso de feedback. Una distorsión y un tono idolatrados por muchos y que fueron creados en el estudio combinando tres amplificadores para un efecto devastador.
Todo un sobrepeso que se torna obsceno a la vista y al oído. Un vacío en el que se despeña todo intento de placer hedonista y la heroína se hace dueña del sinsentido y la desgana. Electricidad, arena, paisajes volcánicos y la aridez de la existencia conforman el escenario de esta tragedia. Todo demasiado detallado, demasiado exagerado y demasiado estremecedor.
★★★☆☆
"(...) If there were water
No hay comentarios:
Publicar un comentario