
Pain to Power (Maruja, 2025)
POST-#@?$. Este disco puede haber sorprendido al mundo, pero eso no significa que los de Mánchester no vinieran anunciándolo a base de directos incendiarios, unas crujientes grabaciones de sus ensayos hechas con un móvil y un reguero formidable de singles y EPs que ya deberían habernos puesto en guardia. Lo que no implica que haya que conocer la precaria, aunque interesantísima, prehistoria de esta banda tan peculiar para poder quedar ojiplático ante el que se puede llamar su estreno oficial en largo.
Y es que es sumamente simple disfrutar de la barbarie que nos ofrecen aquí estos británicos de ancestros irlandeses. Una herencia que emplean como una dulce maldición que les espolea a aumentar el misterio con títulos en gaélico aquí y allá. Tan sencillo es meterse en el disco como difícil describir su sonido. No en vano, estamos ante una amalgama perfectamente moldeada donde encontramos post-punk y post-hardcore, rap y spoken word, free jazz y música clásica, gravedad y euforia, orgasmo y denuncia... Todos los extremos, todo el placer y el daño en una aleación brutal, frenética y divinamente hermosa en su núcleo incandescente.
No he pretendido describir a la perfección lo que hacen Maruja con sus instrumentos, también atípicos en su combinación para una banda de rock. Guitarra, bajo, batería y saxo en su versión más endemoniada, otras veces lírica y siempre apasionada hasta la médula. Aun así, leo mis palabras y creo que de alguna forma, sin decir nada claro, dejándolo todo tan abierto, he dado en el clavo. Modestia aparte, si los mancunianos suenan a algo, es a todo lo contrario que Mánchester nos pueda sugerir. Ni a Joy Division, ni a los Smiths ni mucho menos a unos Oasis que siempre han despreciado abiertamente. Tanto como para iniciar su carrera musical con la idea en mente de ir totalmente en contra de lo que habían hecho los Gallagher.
No digo que sea un planteamiento original ni loable. Partir del odio no puede ser nunca buena idea, aunque tampoco niego que tener las ideas tan claras ayuda a que suenes creíble desde el segundo cero. Esa sería otra de las cualidades de este disco: una autenticidad que hace que te creas todas sus atmósferas y salvajadas rítmicas sin dudar un instante. Aunque pase del cielo al infierno y viceversa en muy pocos minutos.
No soy de entusiasmarme a la ligera. Menos aún con novedades de grupos emergentes. Será por eso que estoy tan descolocado. Sin embargo, también tengo alergia a la injusticia y siempre intentaré dar al césar lo que es del césar. Disco del año, sí, pero sobre todo un álbum que me ha llegado como agua de mayo para lavar mis heridas y volver a la batalla con fuerzas renovadas.
★★★★☆
1 Bloodsport 3:42
2 Look Down on Us 9:58
3 Saoirse 5:13
4 Born to Die 10:04
5 Break the Tension 3:44
6 Trenches 3:32
7 Zaytoun 4:20
8 Reconcile 9:40
Total: 50:13








